Temas de Salud y Nutrición

Temas de interés - 6 claves básicas

Que si te comes esto y aquello no, que si puedes consumir cierta cantidad de este producto y todo lo que quieras de este otro… la alimentaciónes como una fórmula matemática: puedes hacer combinaciones, mezclas y operaciones de todo tipo entre los alimentos ateniéndote al resultado.

En lo que a la forma de alimentarte se refiere, ten cuidado. Lo que comes y bebes influye en tu salud y bienestar, así que préstale más atención a los lácteos y a las carnes, por ejemplo. En esta ecuación, los elementos importan más que las x y las y.

¿Qué puedes comer y qué no?, ¿cómo alimentarte bien?, ¿cómo empezar a cuidarte? Son todos unos grandes misterios y los secretos —o las respuestas, mejor dicho— están en la información de calidad que tengas y en la que, finalmente, se basan tus hábitos alimenticios.

Estas seis claves básicas te ayudarán a mejorarlos y a ser más consciente de lo que llevas a tu boca. Comer es una actividad muy placentera y descubrirás que lo es aun más si te preocupas por tu calidad de vida.

1. No te quedes en lo mismo: varía tu dieta. Hay infinidad de alimentos que no has consumido con seguridad. Agrega a tu lista de mercado esos productos inexplorados. Tu paladar te lo agradecerá.

2. Adiós a las grasas, el aceite, el azúcar y la sal: despedirse por siempre de estos componentes es imposible, pero si reduces su ingesta lo más que puedes harás una diferencia. Cambiarán con el tiempo tus costumbres culinarias y, por ende, tu cuerpo.

3. Aliméntate de acuerdo a tus necesidades y condiciones: si tienes alguna enfermedad, si el médico te prohibió comer algo, si eres alérgico a algún alimento… ten en cuenta todas esas realidades al momento de planear tu alimentación. Parece obvio, pero no lo es.

4. Toma agua: es el líquido vital y debe estar en tu dieta. No te excedas en su consumo porque en cantidades desorbitantes tampoco es buena, sobre todo si tu estilo de vida es sedentario (si haces actividad física, la historia es diferente). Lo recomendado es que consumas entre seis y ocho vasos de agua al día.

5. Todo en su justa medida: volvamos a las fórmulas matemáticas. Ni más ni menos. Todo hasta un punto medio. No es bueno que después de comer quedes con sensación de llenura, pero tampoco con hambre porque esto te dará más ansiedad.

6. Incluye por lo menos un elemento de cada grupo alimenticio en las comidas del día (proteínas, harinas, frutas y verduras, etc.).